Ley de Segunda Oportunidad ¿cómo funciona?
En los últimos años los trabajadores autónomos, así como los emprendedores han exigido la creación de una Ley de Segunda Oportunidad.
De acuerdo a esta Ley de Segunda Oportunidad, si un empresario contrae una deuda y se encuentre insolvente, siempre que sea por motivos ajenos a su voluntad, seria beneficiario de la nueva normativa y podría volver a empezar.
¿Cómo funciona?
En esta Ley le permitiría a los que por una u otra razón tuvieron una experiencia empresarial fracasada poder volver a empezar, beneficiando tanto a personas física, particulares, así como los consumidores.
Se pretende, hacer justicia, igualando la persona física con la jurídica, para no dejar una deuda para toda la vida, según esta establecido en el Código Civil, en el principio de responsabilidad patrimonial.
Sin embargo, para disfrutar del beneficiario que contempla esta normativa es imprescindible que el deudor cumpla previamente con una serie de parámetros.
Requisitos
Inocencia
No puede haber sido declarado culpable en el concurso de acreedores, ni tener condena en sentencia firme por delitos que vayan. contra la Seguridad Social la Agencia Tributaria y el Derecho y Libertad de los Empleos en los últimos diez años.
Acuerdos Extrajudiciales
Debe haber intentado o conseguido un acuerdo extrajudicial de pago con sus acreedores.
Oferta de Empleo
Este requisito indica que no puede haber rechazado en los últimos cuatro años alguna oferta de trabajo que este acorde con su capacidad
Registro Público
Debe aceptar inscribir este beneficio en un Registro Público Concursal.
Propuesta de Plan de Pago
Para ser beneficiario de las bondades que ofrece esta normativa es preciso que recurra a los servicios de un procurador y un abogado. Estos profesionales presentarán ante el juez que se haya ocupado del concurso de acreedores, la solicitud respectiva.
El empresario, antes de esta solicitud debe intentar llegar a un acuerdo extrajudicial con sus acreedores y presentar una propuesta para el pago de la deuda con una duración de cinco años
Solo quedará libre de la totalidad de la deuda si al concederle el beneficio de manera definitiva se demuestra que el deudor sin duda alguna carece de los necesarios recursos para poder afrontar el dinero que debe.
Esta ley de Segunda Oportunidad es una inmejorable oportunidad que se le brinda a todos aquellos emprendedores que presenten alguna insolvencia y les permite empezar prácticamente de cero, sin arrastrar la deuda de sus anteriores empresas.